Conversando con mis amigas y familiares jóvenes menores de 30 años, me expresaban que el tema de las citas ahora era complicado y retador para llegar a conocer a la persona adecuada para enamorarse, debido en parte por la aparición de las redes y aplicaciones de citas.
Si cara a cara a veces ocurren malentendidos, no digamos que de forma virtual las cosas sean menos difíciles por la limitación del lenguaje no verbal. Estar conectados a través de la tecnología a veces pone obstáculos, por eso hay que recordar cuáles claves funcionan mejor, independiente sea presencial o en las redes y aplicaciones.
Siendo que encontrar el amor incondicional en esta vida es un deseo humano universal, algunas preguntas interesantes surgen alrededor del tema del encontrar a quien amar: ¿Cuáles son las claves que se pueden aplicar tanto a la comunicación virtual como a la presencial en un entorno de relaciones amorosas? ¿Por qué es difícil comunicar ideas, sentimientos, preocupaciones y sueños a quienes queremos conocer más? Creo que para empezar a entender y responder cada uno, es recomendable tener a la mano algunas ideas básicas y de sentido común en lo referente a las diferencias que existen entre ambos géneros y luego apreciarlas como algo valioso y no como un defecto u obstáculo.
De forma indirecta el famoso libro del Dr. John Gray, titulado «Los hombres son de Marte y las mujeres son de Venus», inició el cambio en el campo investigativo al señalar los contrastes entre lo femenino y lo masculino como algo que hay que conocer y gozar para comprenderles ya que difieren en todas las áreas de la vida.
El Dr. Gray ilustra: «No solo se comunican en forma diferente, sino que piensan, sienten, perciben, reaccionan, responden, aman, necesitan y valoran en forma diferente. Parecen casi como de planetas diferentes; hablan diferentes lenguajes y necesitan diferente alimento. Esta comprensión ampliada de nuestras diferencias ayuda a resolver la mayor parte de la frustración experimentada cuando uno trata con el sexo opuesto e intenta comprenderlo. Los malentendidos pueden entonces disiparse o ser evitados rápidamente. Las expectativas incorrectas pueden corregirse con facilidad. Cuando alguien recuerda que su pareja es tan distinta como alguien de otro planeta, puede relajarse y zanjar las diferencias en lugar de resistirlas o tratar de cambiarlas… La verdad de estos principios es evidente por sí misma y puede ser confirmada por su propia experiencia y por el sentido común…».
Por otro lado, los 5 lenguajes del amor descritos en el libro de Gary Chapman posibilitan ir intuyendo cómo es la persona a la que se quiere conocer mejor cuando se busca tener citas (dating o salir con alguien), indistintamente sea presencial o las redes. Estos lenguajes son: Palabras de afirmación; Tiempo de calidad; Recibir regalos; Actos de servicio; y Contacto físico. «En el contexto de tener citas, esto puede significar expresar aprecio verbalmente, pasar tiempo de calidad juntos, dar regalos significativos, hacer cosas por la otra persona y mostrar afecto físico de una manera que sea significativa para ambos. Las citas pueden ser una oportunidad para descubrir y comunicar estos lenguajes amorosos entre las personas involucradas. Por ejemplo, si alguien valora el tiempo de calidad, disfrutaría más una cita tranquila y enfocada en la interacción personal, mientras que alguien que valora los actos de servicio podría sentirse más apreciado si la cita involucra ayudarse mutuamente o hacer algo práctico juntos». (Me pareció interesante utilizar ChatGPT para este último párrafo para resumir fuentes).
No hay que olvidar que en cualquier tipo de relaciones interpersonales satisfactorias lo ideal es buscar rodearse de personas buenas y mejores que nosotros. De acuerdo con la Dra. Rojas-Estape, existen dos tipos de individuos claramente diferenciados: «personas vitamina» y «personas tóxicas», de allí la importancia de analizar al principio de una relación, ya sea virtual o presencial, cuál de las dos estamos tratando de conocer, para alejarse del «tóxico (a)» y quedarse con las «personas vitamina», ya que estas últimas siempre se esfuerzan por tener una mirada positiva, optimista y agradecida, convencidos de que la felicidad implica enfocarse en el «vaso medio lleno» y no en encontrar el lado malo de las situaciones y de las personas. (De su libro «Encuentra tu persona vitamina»).
Es recomendable mejorar la comunicación interpersonal indistintamente se quiera establecer un vínculo sano entre quienes se están recién conociendo en las redes o presencialmente, o si es entre parejas de quienes ya son novios o entre la esposa y el esposo. Tratar de ser mejores comunicadores aumenta las posibilidades de éxito al seleccionar a la persona digna de una relación desde el inicio de esta (sin importar cómo surgió), consecuentemente mejorando la autoestima de ambos, su dignidad, la confianza mutua y la responsabilidad emocional, acrecentando además la calidad del amor y la amistad.
Columna de Opinión, La Prensa Gráfica, 4 de febrero de 2024
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